Nintendo gana la batalla contra las DS Flash Cards en Francia

Una victoria para Nintendo y grandes pérdidas para las compañías que proporcionan las herramientas para «piratear» la Nintendo DS.

Después de la batalla legal que ya llevaba más de 4 años abierta, la corte de apelaciones en Paris, decidió la semana pasada que es ilegal fabricar y vender este tipo de tarjetas, obligando a varias compañías pagar cuantiosas sumas a Nintendo.

El caso comenzó en Diciembre del 2007 cuando la policía francesa realizo cateos y diversos operativos por todo el país y se decomisaron miles de DS flash cards, sin embargo, en Diciembre del 2009 la corte falló a favor de la compañía Divineo, apoyando su argumento de que Nintendo estaba ilegalmente protegiendo su consola y no dejaba que los desarrolladores pudieran crear aplicaciones y Homebrew que pudiera correr en la consola libremente.

Nintendo obviamente no se quedó con los brazos cruzados y apeló la decisión de la corte llevando el caso a los tribunales de Hong Kong y demandando a la compañía Divineo por 44.6 millones de Euros.

Divineo y otras cinco compañías fueron encontradas culpables de los cargos de importación, venta y distribución de flash cards, y tendrán que pagar más de 460,000 Euros.

Esto es sólo por los cargos que se le imputan a las compañías, ya que aparte de esa cantidad, todavía deberán de pagar a Nintendo la cantidad de 4.8 millones de Euros por los daños ocasionados.

Además de Francia, otros países Europeos como Alemania, Italia, Bélgica y el Reino Unido ya consideran ilegal este tipo de dispositivos y cualquier distribución, manufactura o venta de estos tendrá consecuencias legales.

El director de Nintendo Francia, Stephan Bole, argumenta:

“Nintendo apoyó esta acción criminal no solo por el bien de la compañía, sino por el interés de sus socios desarrolladores, que dedican tiempo y dinero en el desarrollo legítimo de software”

Divineo ya había sido encontrada culpable de trafico de chips y software para poder correr piratería en el PS2 en el 2006 y de igual manera tuvo que pagar 9.5 millones de dólares por daños en una corte de California en el 2006.

Un pequeño triunfo para la lucha contra al piratería que, sin duda, hace falta que en muchos otros países también se regule o se penalice este tipo de actividades que solo perjudican a tanto jugadores como a compañías y desarrolladores.