Reseña | The Legend of Zelda: Skyward Sword

25 años parecen muy lejanos, desde aquel día en donde un joven con pinta de «elfo» debía enfrascarse en una misión por rescatar a una princesa. ¿Mario Bros.? El argumento inicial y básico del juego hacia pensar en que se trataría de un cliché, pero no, esto causo una revolución en la manera de jugar y de narrar una historia, nació «The Legend of Zelda» una de las franquicias con mas éxito de Nintendo, un juego que es considerado de culto entre los gamers que somos fanboys de esta historia llena de fantasía y misticismo.

Este género de aventuras y rol, en donde no sólo se trata de avanzar y avanzar de manera «plana» en el juego, sino que nos ofrece cierta libertad para explorar, nos entrega ahora en su 25 aniversario, el catalogado «Juego del Año»: The Legend of Zelda: Skyward Sword.

Para decir que es «el mejor Zelda de la historia» se necesita mucho, y son palabras muy grandes después del gran juego y una de las mejores historias en cuanto a argumento y narrativa como lo impusieron The Legend of Zelda: Ocarina of Time y The Legend Of Zelda: Majora’s Mask. Pero sin lugar a dudas, la gente de Nintendo, esta vez, se lució, se la «bañaron» (como dirían en el norte de México).

Para empezar quiero comunicarles que The Legend of Zelda: Skyward Sword no se podrá jugar sin el Wii Motion Plus, por lo que la gente de Nintendo ha lanzado un bundle especial de colección que contiene:

• Un Wiimote dorado y con serigráfia referente «The Legend of Zelda» y con un built-in Wii Motion Plus .
• Un Soundtrack totalmente orquestado con algunas canciones que han marcado a este juego durante 25 años.
• La copia de «The Legend of Zelda: Skyward Sword».
• Un par de pilas.

Si no compras está edición lo único que obtendrás será el soundtrack y la copia del juego.

Y vámonos a lo bueno.

Link es un estudiante de la academia de caballeros de «Skyloft» (Neburia en español), la cual es una cuidad que flota sobre las nubes. Cada habitante posee «un alma gemela» en forma de «pájaro gigante» a los cuales llaman «Loftwings» (Neburis en español, sí, sus traducciones son a veces muy extrañas).

Nos despertamos el día del «Torneo Celeste», donde el ganador dará su primer paso para convertirse en todo un caballero de los cielos. El problema de Link es que su Loftwing está desaparecido y para poder participar, lo necesita forzosamente. Tu rival, un tipo alto y fornido que se cree galán, es quien lo escondió y después de algunas peripecias, obtener tu espada en el gimnasio y entrenar un poco, estarás listo para buscarlo.

Una vez liberado tu Loftwing comienza el torneo. Cabe mencionar que no es cualquier Loftwing, es uno rojo el cual ya se creía extinto y con el cual Link tiene una conexión muy especial.

Cuando Link vence a sus oponentes, Zelda le otorga su «manto sagrado» (no se cómo llamarlo) y deciden ir a celebrar el triunfo surcando los cielos. ¡Oh error! Mientras Zelda y Link vuelan en sus Loftwings, un malévolo tornado color marrón, invade la ciudad sagrada de Skyloft, Zelda cae a la «Tierra» y es tragada por una especie de ballena gigante asesina.

Despertaremos con el Rey de Skyloft, quien nos dice que tenemos algunas capacidades «especiales» y que somos, tal vez, los elegidos para salvar a su hija y al mundo. Pero para eso debemos bajar a la «tierra prohibida», algo que ningún habitante de Skyloft ha hecho. Ahí es donde comienza la aventura de verdad: en el fantástico mundo de Zelda que ya muchos conocemos y que además está mucho más enriquecido en esta edición.

¿Apoco no es el sueño de cualquier fan de Zelda, blandir la espada para derrotar a todo tus enemigos? En esta edición en verdad parece que tienes una espada y un escudo en tus manos. El Wii Motion Plus hace «magia», pues con sutiles movimientos de muñeca, éste responde, además de que el nunchuck nos permitirá cubrirnos con el escudo.

Cada corte o movimiento que hagas, tendrá una respuesta satisfactoria, ya no será tan fácil eliminar enemigos como Lizalfos o Deku Babas por ejemplo. Tendrás que atacar de diferentes formas y ángulos para poder golpearles, algo que resulta absolutamente divertido. Además podrás golpear con el escudo, hacer ataques giratorios y por si fuera poco, tienes la opción de un «golpe de gracia» muy al estilo de Kratos (si alguna vez jugaste God of War), pero sin sangre.

El Wiimote es totalmente responsivo, no como en Twilght Princess  que había que agitar a lo loco y terminar con un desgarre en el brazo o una tortícolis. Aquí también nos permitirá hacer cosas como brincar, subir por paredes, enredaderas y colgarnos de cornisas; lanzar bombas en forma de bolas de boliche, controlar un pequeño «insecto a control remoto»; además la resortera y el arco se sienten como si en verdad estuvieras usándolos, balancearnos sobre cuerdas muy angostas y sacudir las mismas, son también actividades fundamentales y entretenidas.

En esta edición existe la opción de regresar a Skyloft, al bazar para hacer «upgrades» a nuestros items. Por ejemplo: el escudo inicial es de madera y se va desgastando hasta romperse (se indica su «desgaste» en una barrita) y en escenarios con fuego, éste no resiste. Para eso debemos actualizarlo pagando una módica cantidad de rupias y de diversos «items monetarios» (no se cómo llamarlos pero son pequeños tesoros) que encontramos a través del juego en pasto, cavando o nos los darán los enemigos al vencerlos.

La molesta Navi no aparecerá, en cambio tendremos a una espectacular asistente llamada «Fay» que nos guiará a través de la aventura. Además algo que me gustó mucho es la interactividad en las conversaciones, ya no será el clásico «apriétale «A» para que siga», aquí podemos elegir alguna de varias respuestas para continuar la conversación (no afectan el juego, pero le dan un enfoque diferente a cada conversación).

El nivel de complejidad de los acertijos a resolver va mucho mas allá, lo que supone un reto muy interesante (cuando lleguen a «El Templo de la Contemplación» que es el primero, lo notarán) y la IA de los enemigos es elevada, por lo cual no será nada fácil derrotar a algunos.

Un juego con muy rico contenido en colores y paisajes, si bien sabemos que el Wii no es para nada el mejor en capacidades gráficas, en esta edición de Zelda se nota que se esmeraron. Las apariencias de Link y Zelda son un tanto más adolescentes, frescas y proyectan energía. Skyloft se parece mucho a Kakariko Village en Ocarina of Time, pero cuando bajamos a las «tierras prohibidas», la ambientación es simplemente espectacular y diferente.

Los detalles gráficos han sido muy bien cuidados (de acuerdo a las capacidades del Wii) y a esto le podemos sumar algunos extras como los colores que remiten a Wind Waker. Los templos son una obra de arte, cada pared, cada enemigo, hasta las telarañas son algo remarcable. Todo tiene vida propia y es increíble como puede acaparar tu atención, al grado que llegas a creer que estas en ese mundo.

El soundtrack es INCREÍBLE, todo esta totalmente orquestado, cada pieza que se toca en el juego se escucha sublime debido al gran trabajo de muscalización. La atmósfera de un juego con escenarios tan vivos, más la manera en la que la música te envuelve, hace que puedas casi sentir lo que Link, es asombroso cómo Nintendo ha logrado todo esto.

Si eres fan de Zelda (como yo) éste es un juego que NO TE PUEDES PERDER y más aún si no tienes un Wii Motion Plus, es el pretexto perfecto para comprar la Edición Especial con el control, que la verdad es muy bonito.

Un juego muy bien logrado, con una gran historia y con desafíos que te dejarán un gran sabor de boca. La manera en la que el Wiimote responde para poder atacar es asombrosa y te garantiza muchas horas de diversión.

Para mí The Legend of Zelda: Skyward Sword es el mejor Zelda de la historia.