
La compañía finlandesa que ha tenido un desplome en sus ventas de teléfonos celulares ha bajado su ranking para su margen de beneficios según la agencia de calificación de riesgos Standard & Poor’s (S&P).
Los analistas de S&P rebajaron un escalón la calificación crediticia de Nokia a largo plazo, y recortaron su nota a corto plazo, dejando a la compañía finlandesa al borde del bono basura.
Standard & Poor’s es una agencia de calificación de riesgo, división de la empresa McGraw-Hill, dedicada a la elaboración y publicación periódica de calificación de riesgos de acciones y bonos, que fija la posición de solvencia de los mismos.
Pero no todo acaba ahí para nuestros amigos de Nokia ya que ha quedado abierta la posibilidad de una nueva rebaja si Nokia no mejora sus márgenes de beneficios o si su efectivo neto cae hasta los 2.000 millones de euros, respecto a los 5.600 millones que tenía a finales de 2011.
Al parecer la nueva alianza que Nokia ha pactado con Microsoft para fabricar las nuevas terminales de serie «Lumia», que tendrán el sistemas operativo móvil de la compañía de Bill Gates, Windows Phone, puede ayudarle a mejorar a medio plazo su posición en el competitivo mercado de los «smartphones».
Sin embargo, aun es incierto si Windows Phone sera la salvación ya que el desplome de Symbian ha sido demasiado crítico.
Según la consultora Strategy Analytics, Nokia tuvo en el último trimestre de 2011 una cuota de mercado del 12,6 % en el segmento de dispositivos inteligentes, aunque logró mantener su liderazgo mundial en el mercado global de móviles con una cuota del 25,5 %.
«Esperamos que la cuota de mercado de Nokia y el precio medio de sus teléfonos se estabilice en los niveles actuales gracias a la reciente introducción de sus nuevos dispositivos, pero creemos que el mercado global disminuirá anualmente entre un 5 % y un 10 % durante los próximos dos años«, señaló S&P en un comunicado.













Symbian decayó, la aparición de Android y iOS dejó a Nokia como «last resource» entre los compradores. Es momento de que replanteen sus objetivos, y se fijen la meta de sumarse al boom de los «nuevos» OS para moviles.