Eyes on | Christopher Nolan y Batman

De los cómics, juegos y películas de Batman, junto con cada uno de sus personajes, hay mucho que decir. De Christopher Nolan y Christian Bale otro tanto. Aquí trataré de compartir mi opinión sobre qué hicieron para alcanzar el éxito del héroe enmascarado en cine (y todo sin spoilers).

El hombre que le dio a Batman un futuro sombrío  

Christopher Nolan ha sido un director muy reconocido a lo largo de su carrera por su calidad y dedicación, y siempre se ha involucrado en proyectos que de alguna forma salen de lo común. Parece ser que cuando el cineasta no está de descanso, se dedica a hacer parecer que es sencillo crear películas exitosas económicamente, ante los críticos y que además generan cantidades enormes de seguidores fieles, sin mencionar que se ha destacado con estos logros en ciencia ficción (género muy exigente) y en su recientemente terminada interpretación y adaptación de Batman. Sobre lo último, bien podría darle unas lecciones a Joel Schumacher.

Entonces por qué lo culpo de un futuro trágico para el hombre murciélago: se debe a que tras el apogeo, viene el declive y sin duda, por lo menos durante una o dos décadas, no podrá existir una reencarnación cinematográfica del detective enmascarado, que supere (o por lo menos se compare con) lo que logró el interpretado por Christian Bale. No dudo que halla otros hombres brillantes, capaces de hacer un trabajo quizás mejor, pero lograr la aceptación y seguimiento (y provocar inspiración) de tanta gente (en especial de los fanáticos), hará que el futuro en cine del «cruzado encapado» sufra comparaciones.

Crédito: Ron Phillips

¿Cómo lograron esto Bale, Goyer y los hermanos Nolan?

Muchos hablan acerca de que Bale interpretó a un Batman “realista”, pero si en verdad tuviera algo que ver con la realidad, el encanto se perdería. ¿Qué hay de realista en un hombre que combate al crimen organizado usando combate cuerpo a cuerpo y siempre está solo? ¿Cuál es el “realismo” en prototipos de armamento y tecnología militar que logran ser escondidos del departamento de defensa de EUA? Es la fantasía la que asombra. El acercamiento que se hizo bajo la dirección de Nolan, fue más bien presentando un héroe verosimil dentro de su universo, que funciona bajo sus reglas y es lógico o válido (recordando que los silogismos no forzosamente son ciertos, sino sólo coherentes).

Christopher Nolan tampoco descubrió el hilo negro, pues el Batman representado en las historias y guiones de la pluma de David S. Goyer, el director y su hermano, a pesar de ser muy distinto en aspectos clave a los retratados por Adam West, Michael Keaton, Val Kilmer y George Clooney, no es nuevo como tal. Simplemente retomó ideas (y hasta momentos particulares) de algunos cómics y novelas gráficas (para los puristas que marcan las diferencian) para reinventar a los conocidos personajes y llevarlos en una presentación más amigable y accesible a un público mucho mayor.

Crédito: Ron Phillips

Y es ése el centro de la magia que a muchos nos encantó: poder acceder a un universo gigantesco, con personajes muy humanos, de manera sencillamente explicada en un primer filme, que más adelante abrió la puerta a otros dos aun más grandes. Este fundamento es muy difícil de alcanzar, pues encantar a las masas y al mismo tiempo a los “críticos expertos” no es cosa fácil (sin olvidar el éxito comercial). Claro que hay errores en las cintas (como en cualquier obra humana), sin embargo quedan sofocados al compararlos con los logros.

Las múltiples mofas sobre la voz que adopta Bruce Wayne al disfrazarse por las noches, no es nada en comparación con el personaje frágil y humano que se aprecia a lo largo de la trilogía. Éste es uno de muchos ejemplos de lo que un gran trabajo de equipo tuvo como resultado. La dirección de Christopher Nolan conlleva mucha responsabilidad, no obstante es todo un grupo de profesionales los que logran el éxito de una empresa tan grande y ambiciosa como lo fue esta.

No todo gira al rededor del murciélago

Crédito: Ron Phillips

Ni siquiera en la narrativa las cosas suceden a propósito de él salvo en contadas ocasiones. ¿Han escuchado que el narcotráfico, la prostitución, el asesinato, el tráfico de personas, etc. no son causas, sino síntomas de los problemas de raíz de nuestra sociedad? Pues son esas mismas cosas las que combate el detective favorito de muchos en sus historias y por lo tanto él, el símbolo que pretende ser, surge como una segunda consecuencia (o síntoma) de los problemas. Batman no es natural en Gotham, es un elemento más del desorden y “sucede” o “surge” cuando hay condiciones extraordinarias que merecen su atención (no por nada hay ocho años entre la historia de El Caballero de la Noche y el cierre de la trilogía).

Sin Joker, Scarecrow, Ra’s al Ghul ni Bane (así como todos los villanos que no aparecieron en esta trilogía), no habría necesidad de tener a un loco vestido de murciélago dando su vida por los demás. Es una narrativa interesante la de muchos héroes y súper héroes, pues su bondad y demostraciones de humildad y desapego hacia sus vidas, dependen de que existan antes otras personas que atenten contra derechos y libertades de su entorno (a diferencia de los antihéroes). Sin un Carmine Falcone, Bruce Wayne habría vivido sintiéndose víctima del mayor sufrimiento en la Tierra (cuando estaba rodeado de privilegios) y desconociendo la mente del criminal en carne propia.

Las opiniones son tan variadas como personas hay en este planeta. Puedo gritar y expresar con mis amigos cuánto habría deseado ver en esta trilogía, bajo esta dirección verosímil, humanizante y semejante a nosotros, el retrato de Harley Quinn y en otro momento a The Riddler. Me encantaría haber visto a la psiquiatra obsesionada con el psicópata o al genio exprimiendo la mente del caballero de la noche hasta sus límites con complejos acertijos. Sin embargo, de opinar a criticar hay gran diferencia y su ausencia no es un punto de crítica o que desfavorezca a la saga. Por más que muchos podamos querer haber cambiado «esto» o «aquello» (en técnica, en narrativa o hasta en reparto), debe quedar claro: el universo de este Batman que muchos amamos y que alzó la franquicia hasta su punto máximo, funcionó, funciona y pasará a la historia no por sus carencias, sino porque fue exactamente como fue, con decisiones tomadas a cada momento que no quisieron complacer a todos, sino que embonaban a nivel cinematográfico y de negocios y buscaron la calidad y excelencia. El éxito fue el resultado de ese trabajo.

Mérito y futuro

Como está escrito al principio y desde el título: la herencia de Nolan (junto con Bale, Goyer y el hermano del director y todos los involucrados), será un futuro sombrío. No digo que venga inmediatamente la caída, tal vez se supere lo hecho hasta ahora, pero el siguiente responsable de idear novedosamente al vigilante nocturno deberá ser alguien que verdaderamente ame los retos y a quien no le importe vivir «a la sombra» de las comparaciones. Claro que también Nolan heredó con su dirección y amor por el cine una gran cantidad de cosas más, pero subió mucho la barra dentro de esta franquicia y eso, es algo que muchos creían imposible tras ver un traje de Batman con pezones.

Algo que muchas veces se deja de lado al hablar de Batman, Bale y Nolan, es todo lo que sucede en el mundo real (fuera del cine, vamos). Su impacto fue mayor del que normalmente recordamos, pues ya son siete años desde la salida de Batman Inicia. Haciendo un recuento se pueden apreciar algunos elementos interesantes. ¿Ya dije que recató a este héroe de DC y subió las expectativas? Pues si lo reitero es porque fue gigante el logro. Los fanáticos y los críticos no sólo tenían la decepción de lo hecho por Schumacher, que ya era suficiente y aunque ganó dinero, no fue éxito rotundo ni fenómeno mundial y fue fuertemente criticada. No, aparte de eso tan sólo un año antes del estreno de Batman Inicia, Halle Berry (dirigida por Pitof) se había encargado de destrozar a Catwoman (lo único decente del universo de Batman que quedaba en el imaginario popular gracias a Pfeiffer).

Las esperanzas en 2005 existían entre los conocedores de Nolan (por Memento principalmente) y Bale (para algunos por The Machinist y Empire of the Sun para pocos), pero las grandes masas no sabían qué esperar. Todos sabemos cómo acabo y sonreímos por ello. Además ofreció una nueva visión de los personajes de cómics: la gente de dio cuenta de que no tienen que usar colores brillantes ni atuendos estrafalarios. No únicamente pasó eso, sino que rompió un estigma (muy erróneo) que los cómics y sus derivados compartían con los videojuegos y el animé: «son productos para niños y/o gente muy infantil/inmadura». Son industrias de nicho, es verdad, y poco a poco han sido mejor entendidas y ganando terreno, pero el paso dado en 2005 fue gigante a comparación de los pasos más cortos que se están dando en las otras dos industrias. Esto permitió que las masas volvieran a dar oportunidad al cine de súper héroes y que proyectos grandes como el de The Avengers se llevaran a cabo.

Además permitió que otros héroes fueran abordados similarmente (como Iron Man) y que franquicias de nichos muy pequeños (a comparación de las más populares) y de universos muy verosímiles se adaptaran al cine: V for Vendetta y Watchmen, también distribuidas por Warner Bros., Kickass por Paramount o Wanted por Universal. Junto con esto viene una herencia de más cintas como la segunda etapa de The Avengers, el caso de Man of Steel (también producida por Nolan) y el altamente especulado proyecto de Justice League of America en donde tendríamos que ver a Batman nuevamente (gran reto), Superman, Green Lantern (alguien salve a éste en el cine por favor, tiene potencial desperdiciado) y Wonder Woman, por lo menos. Dicho hecho nos puede dar esperanzas que, por el buen desempeño del equipo a cargo de Nolan, seguramente se pueden cumplir y ofrecer un producto de calidad, pues DC y Warner Bros. seguramente no sueñan con perder a sus seguidores como deporte extremo.

Y los gamers no olvidemos que también le debemos en parte la creación de Batman Arkham Assylum y Batman Arkham City.

La tragedia no es sólo para Gotham

No es posible hablar de este Batman sin recordar la pérdida de Heath Ledger hace cuatro años la cual fue muy sonada en su momento y qué más podríamos desear, sino que él aún estuviera con su pequeña. Más recientemente, la tragedia en Aurora, Colorado llenó a muchos depesar a nivel mundial. Es cierto que las tragedias suceden a diario en todo el mundo y deberían recibir la misma cobertura. En este caso particular, todo el equipo de Gamer Style expresó y expresa sus condolencias a las familias de los 12 difuntos y los 58 heridos quienes no pudieron gozar, como todos nosotros, de un rato de sana diversión. Realmente el mundo tiene muchos problemas y debemos tratar de aportar algo mejor al mismo, no jugando a ser superhéroes (“[…]not wearing hockey pads”), sino haciendo lo posible por ayudar a otros y buscando ser un poco más humildes cada día.

 
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