El Ikebana es una de las formas de expresión más antiguas del Japón, se remonta desde hace más de 100 años y no sólo significa acomodar flores de cierta forma; va más allá, ya que un arreglo como estos tiene un trasfondo que a simple vista, no se puede juzgar.
Ikebana es el hermoso arte de cultivar, pasar y acomodar flores y ramas pequeñas, en vasijas o contenedores especiales. Acomodarlas requiere de un trabajo arduo que no cualquiera puede realizar, pues para llevarlo a cabo se necesita de una preparación previa en clases especiales que pueden ser de tres a cinco años de duración.
El significado de esta tradición va más allá de un simple arreglo florar, pues cada objeto que se coloca en él, significa un deseo, y la posición en la que se acomode, dependerá de la intención de la persona o la tradición que tenga su familia respecto al Ikebana.
Poco a poco, este arte ha evolucionado. Entre los estilos más comunes están el rikka, de pie y flores; el seika shoka, con flores vivas; el nageire, con flores remotos dispuesto en forma de cuencos y en jarrones; y la moribana, que consiste en flores amontonadas.
Revista Gamer Style 
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